Hoy hemos descubierto el color verde, nos hemos llenado una mano con el color amarillo y la otra con el color azul, frotamos y "voilá" ha aprecido el color verde. Hemos aprovechado este color para rellenar un árbol, que más adelante decoraremos con motivos navideños. Una experiencia muy divertida y es que no hay nada más gratificante para los pequeños, que llenarse las manos de pintura y ello lo demuestran estas imágenes.
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